Me levante temprano,aún no habia amanecido, tenía una sensación rara y cogi unos bizcochos y un zumo y sali fuera del albergue a desayunar, cual fue mi sorpresa que cuando empezó a salir el sol y me encontre encima de las nubes, los picachos de los montañas sobresalian poe encima de ellas, no sabía si estaba en el cielo, si estaba soñando o si aquello era una realidad, nunca había visto nada igual, corri a despertar a mi hija para que disfrutara de esta imagen que creo que yo nunca podre olvidar.!ya tenía fuerzas para caminar todo los Kms que se me pusieran por delante.
Una vez arreglados nos pusimos afrontar la siguente etapa, había que llegar a Samos donde nos habían hablado del Monasterio, en el estaba ubicado el albergue y había visitas guiadas.
Por el camino nos encontramos con la japonesa del primer dia y unos chicos ingleses, con ellos hicimos parte de esta etapa,ascendimos elpuerto de Poio, donde los peregrinos que alcanzan la cima se quedan arriba dando animos y aplaudiendo a los que estamos ascendiendo, es el tramo del camino más alto de Galicia, recorrimos 12 Kms entre las sierras de Os Ancares y O Courel,imposible describir un paisaje tan bonito, hay que verlo y caminarlo para saber lo que digo,pasamos por pueblos y aldeas casi abandonados hasta que asoma la torre de la iglesia de Triacastela, pueblo situado en un valle por el que vas descendiendo entre bosques.
En Triacastela paramos a comer y reponer fuerzas para continuar hasta Samos, este día el calor no era tan fuerte como en días pasados, algo que agradecimos.Despues de comer retomamos ruta, la marcha se fue haciendo más comoda y agradable, por fin despúes de pasar la pequeña aldea de La Balsa, llegamos a Samos, una vez istalados en el albergue que esta en un lateral del Monasterio,nos dimos una ducha y a las 6 de la tarde nos dirigimos a la entrada principal del Monasterio para la visita.Nos contaron que era de monjes Benedictinos, los que hacen el licor de San Benedictino, que vivian de la huerta. nos contaron tambíen que la escalinata de la fachada sirvío de ensayo al arquitecto gallego Fernando de Casas para la construción de la del Obradoiro de Santiago.
Una visita muy interesante, el pueblo muy bonito y lleno de peregrinos con los que compartimos cena.Fin de un dia maravilloso.